Amanece en la posada Roca de Guía. Es el segundo día, y un hombre se dispone a proseguir el relato de su vida. Su verdadera historia, la que únicamente él conoce, alejada de la leyenda que le han forjado los rumores, las conjeturas y los cuentos de taberna que han acabado convirtiéndole en un personaje mítico: Kvothe... músico, mendigo, ladrón, estudiante, mago, héroe y asesino... El nombre del viento , el primer día de la historia de Kvothe, se ha convertido en un fenómeno apoyado por lectores, libreros y crítica, que recomiendan esta excepcional novela. Ahora la historia sigue en El temor de un hombre sabio , y a aquellos que ansiaban leer esta continuación sólo podemos decirles que la espera ha valido la pena... Actualización : Los enlaces han sido retirados debido a la nueva Ley de Propiedad Intelectual, perdonen las molestias.
Hay que ver cómo suenan esas motos.
ResponderEliminarEntonces, ¿que yo en mi casa no pueda ni estudiar, ni trabajar, ni dormir, ni ver una puñe.tera película se lo tengo que agradecer a esos buenos señores?
Por supuesto, sin esa empresa tendrías silencio absoluto en tu vivenda. Igual deberías demandarles.
ResponderEliminarPS: Genial anuncio.
Yo voy a demandar a Dios, vivo en un pueblo y todos los dias me molestan los pajaros, ovejas y cabras. Pero eso si la leche que me bebo ire a comprarla a china
ResponderEliminarEntonces, ¿quejarse del estruendo habitual de las motos significa exigir silencio absoluto? Se nota que has estudiado.
ResponderEliminarLa siguiente analogía parece más acertada a primera vista, ya que compara a los moteros con varios tipos de animales; pero en realidad es totalmente errónea al considerar que la única solución es erradicar las motos. Yo creo que el problema se solucionaría si moteros y fabricantes tuvieran un poco de consideración.